lunes, 31 de agosto de 2020

ELECCIONES DEMOCRATICAS???



ELECCIONES DEMOCRÁTICAS???

Nuevamente elecciones de gobierno y otros cuentos en el juego cada vez más inútil e irrelevante para las actuales sociedades sufrientes del mundo, no así para los grupos de poder que ven en esta suerte de lotería, la manera de sobrevivir a la situación actual de volatilidad de las instituciones que los han sostenido en lo alto, y que ahora parecen tambalearse.

En el Ecuador, las elecciones de gobierno han sido la ocasión aprovechada por una serie de oportunistas que en las últimas décadas han querido gozar de los privilegios que  proporciona ser presidente de un país y por añadidura también favorecer a su entorno cercano, más la asamblea legislativa y otros,  tal eventualidad les ha permitido conocer los avatares y subterfugios legalistas del juego político y paralelamente hacer negocios afortunados o desafortunados, por lo que se está viendo cada día en el curso de los espectáculos mediáticos que llenan de escándalo las pantallas de los noticieros informativos.

En este contexto, el Movimiento Indígena que alguna vez intentó llegar al gobierno por medio de elecciones, y que una sociedad con un complejo racial que no reconoce ni valora sus orígenes primigenios, los ha rechazado eligiendo, por lo tanto, a personajes expertos en lo que por acá se denomina “viveza criolla” que han defraudado una y otra vez a la población aletargada. Después del último levantamiento indígena de octubre del año pasado donde se involucraron también  grupos violentos, y que ocasionara una dura represión con un saldo trágico de  muertos y heridos por la violencia de la confrontación, el movimiento indígena cobró actualidad e intenta llegar al poder una vez más entre grandes discusiones y polémica al interior de sus comunidades. Los pueblos originarios latinoamericanos han logrado organizarse en los últimos años y aspiran a ser gobierno para dar un rostro diferente al sistema cada vez más decadente y donde se agudiza la desigualdad social. Pocos indígenas, sobre todo comerciantes de artesanías y tejidos, han logrado ubicarse en el negocio de exportación de sus productos y les ha permitido, en parte, insertarse en el sistema, logrando  un buen estado económico y de esa manera han podido acceder a colegios y universidades, pero la gran  mayoría vive en la pobreza, dedicada a labores agrícolas en el campo y al subempleo e informalidad en las ciudades mestizas con una situación desesperante sobre todo ahora con la pandemia.

De la discusión interna del movimiento indígena, que tampoco significa una decisión unitaria, sale una candidatura que busca el apoyo no sólo indígena sino también del conglomerado mestizo y de otros movimientos sociales. La división que generalmente es la estrategia provocada por intereses externos al movimiento y en el fondo viene de los designios derechistas y de poder, debilitan las aspiraciones indígenas que están tratando de conseguir una real “justicia social”, pues no se trata de ese lugar común de los discursos políticos fraudulentos,  sino de una justicia que siempre les ha sido negada.

Hay que ver las campañas electorales que ya empezaron en el Ecuador, y supongo que en otros países también. Por las condiciones actuales, sobre todo, circulan las peleas a través de las redes de Internet, da lástima observar tanta miseria y al mismo tiempo es inevitable sentir indignación por el nivel vergonzoso al que se ha llegado; no es la razón la que predomina sino el insulto, el odio y la ofensa. A ese paso, qué gobierno bueno se puede construir en estos tiempos cruciales con los problemas enormes que afectan profundamente a las sociedades.
La tecnología utilizada en los casos mencionados, y en tantos hechos infamantes que se cometen a nivel mundial para destruir la dignidad y la vida de los seres humanos, tiene que desaparecer por  negativa y perversa.  No es de ese modo como se llegará a cambios positivos, radicales  y necesarios,  porque la emergencia del presente exige poner en marcha los medios  para alimentar y albergar a una población que necesita con urgencia acceder a una vida sana física y mental, para que pueda asumir  consciente y en forma comunitaria,  un proceso de humanización  imprescindible para el mundo en que habitamos ahora.

 

sábado, 15 de agosto de 2020

NOTICIAS SOBRE EL COVID 19



Noticias sobre el covid 19 recibimos todos los días, acerca de los infectados y dramáticamente de los muertos que no pudieron ser despedidos por sus familiares.

Las pandemias, según la memoria histórica, señalan el fin y el comienzo de una etapa o edad de la humanidad. Después de la peste negra en la Edad Media llega el Renacimiento, el cisma de la iglesia Católica romana y una expresión nueva de las Artes y de las Ciencias; sobreviene la Revolución francesa que pone fin a las monarquías como formas de gobierno, tiempo después éstas quedarán como algo folklórico en algunos países aunque mantenidas por el estado como familias privilegiadas, al igual que otras instituciones parásitas que absorben sin razón alguna, las riquezas del mundo.  

Con la gripe española aparecida entre las dos guerras mundiales y la revolución rusa,  se origina el socialismo como un sistema que se contrapone y cuestiona al capitalismo, se inicia el desarrollo tecnológico, la electricidad, la telefonía, la invención y uso de la bomba atómica y la aceleración en el desarrollo de los medios de comunicación; paralelamente crece la industria armamentista considerada prioritaria y el dinero como principio y fin de todas las actividades humanas. Por esta pendiente las sociedades han descendido hacia su deshumanización y han caído en un materialismo grosero. La sensibilidad es vista como un desatino y se promueve la agresión y la violencia como el mecanismo para desarrollar una sociedad que deviene cada vez más en lo que presenciamos ahora.

Con la pandemia, el colectivo humano siente los embates de un sistema fallido que ha sometido a las poblaciones de todos los continentes a las mayores injusticias en todos los ámbitos, y vemos con angustia que la enfermedad ataca sin piedad a los viejos, a los desnutridos y enfermos. Particularmente somos testigos de un sistema de salud impotente frente a la magnitud del contagio,  la educación que ha creado una mentalidad que valora el dinero sobre el sentido humano de solidaridad, y promueve la falta de cordura de las élites que no ven más que la oportunidad para tener ganancias y hacer negocios; su voracidad no les detiene ante nada, la vida para esta gente tanto como para los delincuentes y asesinos considerados de baja ralea, no tiene ningún valor, sólo ven  la manera de beneficiarse a cualquier costo.

Si desapareciesen de este mundo los gobiernos opresores, el armamentismo, los saqueadores de recursos naturales, los prestamistas usureros, los políticos oportunistas y ególatras, las mafias de salteadores y asesinos, nuestro planeta sería un paraíso para  el ser humano que habita y quiere hacer de este mundo un hogar verdadero, que desea proteger a la niñez con amor, donde la gente pueda desarrollar sus buenos sentimientos y actitudes solidarias,  cuya aspiración sea compartir con la naturaleza la alegría de vivir  y alejar de esta realidad todo el odio y la violencia que ha sido causa de la extinción de antiguas civilizaciones. ¿Cómo inventar ese mundo ideal? Quizás haya todavía respuestas afirmativas.