sábado, 18 de julio de 2020

jueves, 2 de julio de 2020

NUEVA NORMALIDAD ???




LA NUEVA NORMALIDAD?????

Ahora, hablar de un país refleja lo que muchos países están experimentando en medio de la pandemia; la situación emergente ha puesto en jaque al sistema acostumbrado a sus normas tradicionales de convivencia. La economía que es lo que más preocupa a los gobiernos, se superpone a la tragedia de la enfermedad que está dejando al descubierto la poca humanidad que corroe a la sociedad humana. La corrupción que destapa la falta de principios de solidaridad que no reconoce al otro como un reflejo de sí mismo; la poca conciencia que arrastra a los políticos a buscar el poder por el poder y la plata, son manifestaciones de la decadencia de esta civilización cuyos síntomas se han materializado en la pandemia.

Las elecciones de nuevo gobierno en medio de la enfermedad social, no quiere ser interrumpida porque muchos de sus aspirantes se aferran con uñas y dientes a unos puestitos miserables que saben les van a proveer de la posibilidad de cargar, como dice el dicho, con el santo y la limosna y piensan salir  a la larga bien librados, aunque se sabe que si la ley no les toma cuentas, la vida tarde o temprano les cobrará caro, porque el mundo ahora es un laberinto, un revoltijo difícil de descifrar,  y se ha convertido en un lugar imposible para refugiar o esconder a nadie.

En una nueva normalidad de un paisito como el nuestro, debería imponerse a todos los funcionarios, asambleístas, y aspirantes a cualquier puesto público, un sueldo que no sobrepase, lo que por acá se denomina como sueldo básico, para ver cuántos de esos que andan preparándose en su campaña para ser elegidos, se dedican a otra cosa y se dejan de discursos patrioteros y tramposos.

No sabemos qué mismo significa la nueva normalidad; creer tal vez que todo va a volver a ser como antes de la pandemia, aunque la realidad nos muestre que hay una gran fractura de los esquemas a los que nos han acostumbrado, y que la sociedad va a tener que dar un vuelco y abrir los ojos ante las consecuencias de todos los errores  cometidos, hechos que nos han convertido en sociedades peligrosas, ciegas y sordas, porque no hemos sabido interpretar, como sucede en una gran sinfonía,  las maravillas que la naturaleza nos ha puesto ante los ojos para que aprendamos a ser felices.